La obesidad es un problema de salud cada vez mayor en todo el mundo. Sus comorbilidades relacionadas implican un alto costo para el Sistema Nacional de Salud y disminuyen la calidad de vida de un paciente. El tejido adiposo se compone de tres tipos de células.
La localización principal de CB1 en el sistema nervioso central representa un límite importante. La estimulación de CB2, principalmente localizada en células periféricas, debería facilitar los efectos antiobesidad sin ejercer una actividad psicotrópica notable.